CACHORROS

CACHORROS

Me gusta empezar pronto con los cachorros, de manera adecuada y adaptándonos a su edad. Los juegos nos permiten estrechar por ambas partes una buena relación de vínculo, respeto y complicidad y serán la base de nuestro trabajo diario con ellos. El aprendizaje se convierte de esta manera en un juego más y nos ayuda a fomentar hábitos y trabajos físicos y mentales tan importantes en esta etapa.
Comenzamos, apoyándonos en el clicker, con ejercicios de pequeñas habilidades a través del descubrimiento. El cachorro aprende a aprender y a no tener miedo a equivocarse ya que solo recibe premios cuando se obtiene el objetivo marcado porque no se castiga el no acierto. No descuidamos el trabajo físico iniciándolo en ejercicios de propiocepción siempre adaptados y respetando el crecimiento de nuestro cachorro y, sobre todo, muchos juegos de motivación y complicidad unidos a espacios de calma y buen comportamiento ante cualquier situación que nos permitirán disfrutar en un futuro en nuestra vida cotidiana.
En una segunda fase, enseñamos a rodear, que aprenda su izquierda y derecha, comienza a entender nuestras posiciones corporales e introducimos túneles y trabajos de cabeza que nos ayudarán en un futuro. A medida que va creciendo, le introducimos diferentes obstáculos en sus juegos, trabajamos las distintas técnicas de forma específica y comprensiva, de manera fácil y aumentando las dificultades antes de realizar secuencias o ejercicios más complejos. Son cachorros y el juego es el aspecto más importante a fomentar y desarrollar.